Es un cordófono de arco musical, de tiras vegetales similar al Carángano ( de bolillo o de vejiga ) y se usa en el Huila para los conjuntos llamados Cucambas ( con tambora, guache, chucho y puerca o zambumbia ). Es la antigua “verada” llanera. Queda en algunas localidades pero está prácticamente en desuso..
Carlos Rojas anota: conocido también como verada. Otro tipo de arco de boca de aproximadamente un metro de longitud, construido de una verada (pistilo de la flor de cañabrava) de cuyos extremos se tensa una única cuerda, originalmente de fibra vegetal, separada de la verada por dos pequeños trozos de madera que operan a manera de pontezuela y cejilla. La cuerda, que antiguamente se fabricaba de fibra vegetal, es de nylon en los escasos modelos actuales. El instrumento utiliza como resonador la cavidad bucal del ejecutante.
Sosteniendo un extremo de la verada entre sus labios, el intérprete presiona la cuerda en diversos puntos de su extensión – a la manera de un diapasón de guitarra – para alterar la altura del sonido y produce con el dedo índice de la otra mano la vibración de la cuerda. El ejecutante utiliza la cavidad bucal como amplificador del sonido y puede obtener algún tipo de modulación del mismo modificando la apertura de la cavidad bucal.
Este tipo de arcos simples son comunes en América y en el Africa negra, continente éste de donde en un principio se creían originarios los usados por la comunidades mestizas latinoamericanos. Sin embargo, desde la patagonia hasta Alaska se ha documentado su uso entre los indígenas americanos.
Su sonoridad, siempre débil y velada, perceptible apenas a corta distancia, hace poco factible su uso como instrumento melódico en grupos de joropo. Sus intérpretes, sin embargo, tocan en la sirrampla golpes y pasajes.