Es quizás el más popular de los idiófonos de entrechoque, llamados así porque el golpe o choque no es promovido por un elemento sobre otro sino indistintamente por cualquiera de los dos e incluso los dos a la vez. Las cucharas son utensilios de cocina, manufacturados en madera de naranjo, cucharo, granadillo, entre otros. Se ejecutan tomándolas en una mano enfrentadas por el lado opuesto a la cavidad y golpeándolas con determinado ritmo sobre la cuenca de la otra mano, sobre el antebrazo o sobre la rodilla. No operan como las castañuelas españolas en que la resonancia se produce entre las dos cavidades enfrentadas, sino entre la de una cuchara y la cavidad de la mano.
Los guasas o guasás son exactamente los mismos tubos de sacudimiento (idiófonos) llamados en el interior chuchos o alfandoques, cuyos extremos son de rejilla para que el sonido sea más perfecto y suficientemente angostos para que no se salgan las semillas de achira o granos de maíz que se les coloca dentro. Los guasás son cerrados en ambos extremos y por ello menos sonoros; así deben usarse varios (3 o 4) en manos de las guasaceras del litoral Pacífico que marcan el pulso rítmico de las cantadoras que son: la glosadora que dice los versos y las respondedoras que cantan los estribillos. Según Hugo Candelario González, se construye en guadua y por dentro llevan semillas de achira o de maíz. Es cerrado en ambos extremos y lleva pasadores de madera (chonta) colocados en forma de cruz para que las semillas se mantengan repartidas en todo el instrumento. La coloratura del sonido en el Guasá - más brillante o más opaco o ronco - tiene una relación directa con el tamaño de la semilla, así como del grado de secamiento de la misma. Por lo general, es interpretado por las mujeres cantadoras formando una polirritmia entre las que adornan o repican y las que arrullan (ritmo constante). Cada cantadora fabrica o escoge el guasá de acuerdo al timbre de su voz.
Es la misma guitarra española y aunque se usa en todos los ámbitos sociales, no debemos olvidar que la guitarra nuestra es el tiple. La guitarra criolla tiene bastante popularidad en muchos departamentos, incluso fuera de la región andina. David Puerta agrega que la guitarra siempre ha estado presente en el quehacer musical colombiano, desde las primeras épocas de la conquista española, siguiendo la evolución propia del instrumento en Europa – primero como vihuela, luego como guitarra de cinco órdenes y, desde comienzos del siglo diecinueve, en la forma que tiene actualmente con seis órdenes simples afinados Mi, Si, Sol, Re, La, Mi en orden descendente. Se usa no solamente en estudiantinas y “tríos de cuerdas”, al lado del tiple y la bandola, sino también para acompañar la voz humana en las diversas modalidades de conjuntos vocales. La influencia mejicana y caribeña de mediados del siglo veinte, incorporó en los núcleos urbanos de la zona Andina colombiana y con propósitos de serenata, el trío de guitarras, con el cual se acompañaron algunos bambucos y pasillos, además de los boleros y otros ritmos propios de esta conformación. Subsisten todavía algunos de estos tríos, especialmente en la zona Cafetera de los departamentos de la cordillera central, pero ya no son muy solicitados para la interpretación de aires de la zona Andina.
Es un idiófono de la zona Andina que se ideó tomando como materiales varios utensilios domésticos como son una totuma o recipiente de beber líquidos, granos de maíz y un pañuelo típico llamado rabuegallo. En la totuma, recipiente formado por un hemisferio del fruto del arbusto llamado totumo o del calabazo, se colocan granos de maíz o semillas duras como las de la achira. La boca de la totuma se cubre luego con el pañuelo para impedir la salida de las semillas y se anuda al dorso de la totuma para sacudir el conjunto y dar el sonido característico que se produce al chocar las semillas entre ellas y contra la madera de la totuma y otras contra el pañuelo asordinando así el sonido.
Usada en Cundinamarca y Boyacá. Lleva ranuras a modo de anillos en casi toda la superficie del tubo de madera. En la primera porción del tubo no hay ranuras pues de allí se desprende una cuerda o pita desde donde se agarra el instrumento. Luego hacia abajo se hacen ranuras e incisiones en la madera y con un trozo de caña o astilla del mismo material se frotan las ranuras para producir el sonido. Hay múltiples variedades de este instrumento en departamentos como Santander.